La fainá es una tortilla (como las mejicanas) en forma de disco, hecha con harina de garbanzos, de poco espesor y que se consume una vez horneada. En Italia no es raro comerla para acompañar a la pizza. Es muy sencilla de preparar y podemos añadirle los ingredientes que queramos. Al no contener harina de trigo es apta para celíacos, y para seguidores de la dieta Seignalet.

Los ingredientes para preparar la fainá son simplemente:

• 200 gr. de harina de garbanzos
• 600 cc. de agua (3-4 tazas)
• sal

Lo primero que haremos será aceitar el molde pizzero (o la bandeja del horno) y calentarlo en el horno durante 10 minutos. Mezclamos la harina de garbanzos con el agua, asegurándonos de que no queden grumos, y echamos sal según nuestro gusto. También podemos añadir pimienta. La mezcla será bastante líquida. La dejamos reposar unos minutos y después la echamos en el molde, y lo colocamos en la parte superior del horno, a fuego medio, hasta que se dore. Luego lo pasamos a la parte inferior del horno hasta su cocción total. Tardará una media hora en cocerse, siempre dependiendo del horno, la temperatura, y el grado de cocción y tueste deseado. Dejamos entibiar para desmoldar. Es normal que la primera vez no salga perfecta, es cuestión de ir probando con la proporción de agua, la temperatura y tiempo de horneado.

Ya os hemos explicado la manera de hacer una fainá básica, pero a partir de esta receta podemos ir agregando ingredientes para hacerla de otras maneras. Por ejemplo, a la mezcla básica se le puede añadir también ajo picado, perejil, orégano, dos cucharadas de aceite o queso. Queda muy bien con cebolla troceada, calabacín y pimiento, añadidos al horno cuando la fainá esté ya un poco consistente y con el tiempo para cocer las verduras sin quemarlas.

Si queremos hacerla rellena, tendremos que preparar el doble de cantidad de la receta básica. Una mitad la meteremos en el horno hasta que empiece a tener consistencia. Entonces le podemos añadir por encima los ingredientes que queramos (verduras, jamón, cebolla, queso…), y seguidamente la otra mitad de la mezcla de harina y agua. Lo volvemos a meter en el horno hasta que veamos la parte de arriba doradita.

Esta receta es muy popular en Italia, y cada región tiene su receta propia, por ejemplo:

A la Piamontesa: agregar 50 gr. de queso rallado.
A la Turinesa: en 550 cm3 de agua licuar una cebolla mediana.
A la Genovesa: agregar dos huevos batidos.

Como esta receta es bastante sencilla, podemos inventar nuestra propia fainá con los ingredientes que queramos.